LA TRILLA PARQUE INFANTIL

El solar, objeto de varios estudios previos, no había tenido ningún uso desde que se derribaron las edificaciones que lo ocupaban, principalmente por su complicada ubicación, acceso y morfología. ¿Cómo darle uso a un espacio sin salida y rodeado por un gran muro de contención y altas medianeras? Los  talleres de participación llevados a cabo por BRFS con los vecinos y asociaciones locales nos mostraron una necesidad latente en el municipio. No existían espacios en el municipio de experimentación infantil. Los accesos de la parcela permiten un buen control y visibilidad para el cuidado de los más pequeños y los desniveles son utilizados y potenciados para el juego. El proyecto plantea un desnivel cambiante como zona de juegos y psicomotricidad. Desniveles que crean una topografía adaptada para distintas edades. Desde puntos con alturas reducidas, para los más pequeños, situadas además en contacto con la zona de arena, hasta las pendientes más inclinadas, con pasos ocultos y largos toboganes para los más valientes.

La pérgola con un diseño orgánico, que está anclada al muro que delimita el parque, acompaña a la topografía de juego y da cobijo y sombra a los más pequeños.